Entorno VUCA, cambio de escenarios por la rápida evolución tecnológica, nuevas estrategias comerciales enfocadas en el cliente, sacuden al sector financiero que se enfrenta a un desafío transcendental: la transformación de sus puestos de trabajo para alinearse con los avances digitales.
Esta evolución va más allá de la simple adopción de nuevas herramientas y procesos, implica comprender las necesidades humanas inherentes a la gestión financiera. Ya no hablamos más de atención al cliente, ahora hablamos como mejorar la salud financiera de las personas de manera integral. Para ello debemos comprender cómo la psicología y la neurociencia influyen en nuestras decisiones económicas, y que podemos hacer con los empleados para que pasen de atender a los clientes a fortalecerlos financieramente.
A nivel psicológico, la búsqueda de protección financiera y el deseo de hacer crecer nuestro dinero son impulsos fundamentales. Estas necesidades básicas, arraigadas en nuestra neurofisiología, moldean nuestra conducta financiera, inclinándonos hacia la minimización del riesgo y la búsqueda de recompensas.
La atención del cliente y el rol de nuestros equipos
Esta evolución es la clave, por la que debemos re pensar los roles tradicionales en el sector financiero y comenzar a redefinidos. Donde antes se centraban en tareas operativas como la apertura de cuentas y la atención al cliente, ahora se orientan hacia funciones estratégicas y proactivas centradas en el bienestar financiero de nuestros clientes. Los empleados deben convertirse en guardianes de la protección de datos y defensores de la salud financiera de sus clientes. Esto implica fortalecer sus competencias para mejorar las habilidades financieras, enseñarles a operar de manera segura y comprender sus necesidades para facilitar su acceso al crédito y a los mercados de capitales.
Es crucial reconocer que la educación financiera desempeña un papel fundamental en esta transformación: Latinoamérica enfrenta desafíos significativos en este aspecto, desde bajos niveles de alfabetización financiera hasta escasa inclusión financiera y falta de formación especializada para empleados del sector. La implementación de programas de formación bancaria y financiera adaptados a las necesidades locales puede marcar una diferencia positiva en la capacidad de las personas para tomar decisiones financieras informadas y seguras.
Los líderes del sector financiero tienen la responsabilidad de ofrecer productos y servicios, y también de empoderar a sus clientes para que tomen decisiones financieras informadas y seguras. Esto requiere un enfoque holístico que combine la tecnología con la empatía y el conocimiento humano. Solo al comprender las complejidades de la mente humana y adaptarse a las necesidades cambiantes de los clientes, podemos crear un futuro financiero más sólido y próspero para todos.
¿Cómo lograrlo?
Por tanto, la reinvención de los puestos de trabajo en el sector financiero implica adoptar nuevas tecnologías, y también comprender las necesidades financieras humanas fundamentales y cómo abordarlas de manera efectiva. Desde la protección del dinero hasta el empoderamiento financiero, esta transformación busca fortalecer el futuro financiero de la región y el empoderamiento de las personas en su camino hacia la seguridad financiera.
Tal como oportunamente el conozca a su cliente se centró en la prevención de lavado de activos, hoy debemos tomar esta bandera de manera integral, conocer al cliente es también saber si tiene o no planificado su retiro, cuáles son sus expectativas de ahorro, si sabe o no sabe invertir, si podemos ayudarle y cuál es el mejor método para hacerlo. Capacitar a los colaboradores en bienestar financiero es crear un contexto comercial superador, unir el beneficio, el bienestar de nuestros clientes al propósito de nuestra organización.
Sigue toda la información de Open Hub News en X y Linkedin , o en nuestra newsletter.