El financiamiento bancario al consumo sigue en expansión en México, aunque sus ritmos de crecimiento empiezan a moderarse. Se evidencia mayor cautela en los hogares, y los bancos marcan la agenda del mercado crediticio.
Los datos oficiales más recientes muestran que el crédito de consumo —que incluye tarjetas de crédito, préstamos personales y créditos de nómina— continúa creciendo, pero con un enfriamiento en el ritmo de expansión.
Según el Banco de México, el saldo de la cartera de crédito al consumo de la banca comercial alcanzó en abril un billón 725 mil millones de pesos, con un crecimiento anual de 10.4 %, aunque este avance fue menor al 11.2 % observado un año antes.
Por su parte, en un informe reciente BBVA señala que el crédito vigente al consumo promedió en el segundo trimestre de 2025 un crecimiento real anual de 9.3%, muy por debajo del 14.2% del primer trimestre del mismo año.
Dentro de esta expansión, la contribución de las tarjetas de crédito representa 2.8 puntos porcentuales del crecimiento, mientras que créditos para bienes de consumo duradero aportan 3.5 puntos porcentuales, reflejando cómo distintos subsegmentos alimentan el incremento general.
Tarjetas y morosidad: el comportamiento de bancos y hogares
El número de contratos de tarjetas de crédito en México sigue en aumento. Al cierre de junio de 2025 se contabilizaron más de 37 millones de tarjetas activas, lo que representa un crecimiento de 5.1 % en un año.
Sin embargo, se evidencia cautela en los saldos, que acumularon apenas 0.9 % de crecimiento respecto al mes anterior en el primer semestre, según datos del Banco de México, lo que sugiere una ralentización en el uso de este medio de financiamiento por parte de los consumidores.
El entorno económico general también influye. En este contexto, la inflación en México se aceleró recientemente a 3.80% al final de noviembre de 2025, un factor que presiona el poder adquisitivo y puede frenar la demanda de crédito al consumo si los hogares priorizan el gasto básico.
Además, hay alertas en torno al riesgo crediticio: datos recientes del Banco de México muestran que la cartera vencida de créditos al consumo llegó a 53 895 millones de pesos a octubre de 2025, con un índice de morosidad de aproximadamente 3.3 % del total, la más alta reportada en ese segmento en años recientes.
Hacia dónde va el crédito de consumo
La combinación de cifras indica un mercado de crédito en transición: sigue en expansión, pero con ritmos más moderados que los observados el año anterior. La moderación es más marcada en segmentos como las tarjetas de crédito y otros préstamos al consumo cotidiano.
Analistas señalan que esta tendencia responde, no solo a factores macroeconómicos como tasas y expectativas de inflación, sino también a una mayor cautela por parte de los propios consumidores y de los bancos, que ajustan sus criterios de otorgamiento ante signos de mayor riesgo.
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