La financiación de los hogares argentinos a través de tarjetas de crédito sigue en aumento, como también lo hacen la morosidad y los costos financieros. Los saldos y transacciones alcanzan niveles récord, pero el ritmo de crecimiento empieza a estabilizarse, mientras el mercado enfrenta mayor riesgo y una posible desaceleración en la recuperación del consumo. En esta nota analizamos diversos estudios de mercado y te contamos cuáles son las alertas que se están encendiendo.
En el último mes, las operaciones con tarjeta de crédito en pesos registraron un crecimiento del 3,4% mensual, alcanzando el 145% interanual; lo que significó un saldo acumulado de $19,3 billones, según un informe de First Capital Group.
Este análisis fue presentado por la consultora que sostiene que frente a este crecimiento que el ritmo comienza a estabilizarse. “Los saldos de financiamiento con plástico también parecen haber alcanzado un límite. Para su repotenciación se espera el lanzamiento de programas de ventas en cuotas por parte del sector privado, dado que los programas de estímulo oficial como ‘Cuota Simple’ llegan a su fin. También toman importancia las estrategias comerciales que fomentan las diferentes plataformas digitales, ofreciendo cuotas y descuentos por períodos de tiempo limitado”, explicó Guillermo Barbero, socio de First Capital Group en el informe que presentaron.
El mes pasado Fiserv hizo hincapié en este dato de crecimiento, y había señalado que podía deberse a que los comercios y los bancos seducen con promociones vinculadas a ciertos rubros y, en comparación con el verano anterior, también se ve un crecimiento en la cantidad de transacciones en 12 y 18 cuotas, con volúmenes y tickets de compra que están muy por encima de la inflación acumulada.
Adeba (Asociación de Bancos Argentinos) también emitió un informe en el que muestra que la morosidad en los préstamos otorgados a personas físicas se encuentra en alza: “en febrero, la mora de las financiaciones a familias subió 0,02 puntos porcentuales, alcanzando el 2,9%, y acumula una suba de 0,3 puntos interanuales”. La mayor alza se dio en las tarjetas de crédito, coincidiendo con el aumento de su uso.
El financiamiento con tarjeta en dólares también mostró un incremento relevante: 4,7% mensual, alcanzando US$779 millones en mayo, un 67,9% más que en igual mes de 2024, cuando se ubicaba en US$464 millones. ¨Esta suba marca una reactivación del consumo en moneda extranjera, que había permanecido rezagado en años anteriores¨, concluyó Barbero, en base a los datos que había informado el Banco Central de la República Argentina al stock del 31 de mayo del corriente año.
Este informe del BCRA, revelaba que en marzo la morosidad aumentó 2,8% en tarjetas de crédito hasta tocar su máximo nivel en tres años, mientras que, en los préstamos personales, la morosidad superó el 4% y marcó su récord en nueve meses.
