Appgate presentó su reporte anual del “Fraud Beat” en el que alerta sobre el desafiante panorama para las empresas latinoamericanas.
El recién publicado reporte destaca un aumento significativo en las técnicas de ataque adversarial durante 2023. El documento fue realizado por Appgate, a través del Centro de Operaciones de Seguridad (SOC) que registró un 77% más de incidentes a nivel global, siendo Latinoamérica la región más impactada con un aumento del 60% de ataques a comparación de 2022.
La técnica que presentaron mayor frecuencia, según el informe de Appgate, fueron los ataques de phishing que aumentaron alarmantemente un 81% entre 2022 y 2023, destacando la persistente y adaptable naturaleza de los ciberdelincuentes, quienes continúan explotando vulnerabilidades con mayor sofisticación. Según el Grupo de Trabajo Antiphishing (APWG), se registraron más de 1,6 millones de ataques de phishing en el primer trimestre de 2023, marcando un récord en la historia de APWG y siendo el peor trimestre observado para esta modalidad de ataque.
En esta línea, la industria mas afectada fue la financiera con un 23,5% de los casos, seguido por el sector de Software-as-a-Service (SaaS) con un 18,8% de los casos y redes sociales con un 18,2% de los casos.
El informe pone el foco, además, en que los ciberdelincuentes están aprovechando las vulnerabilidades de seguridad en aplicaciones y dispositivos móviles, así como la creciente presencia en línea de los usuarios finales en plataformas móviles. Utilizan técnicas como el phishing por SMS y el QRishing para comprometer dispositivos móviles y filtrar datos confidenciales, representando una amenaza significativa para la seguridad de las cuentas. Según la encuesta ISMG Faces of Fraud 2023, el fraude móvil ha aumentado un 35%, con un incremento en los ataques por SMS (30%) y en la creación de cuentas fraudulentas a través de este canal (28%).
Divulgación de información
Otro de los puntos que resaltan del informe es el notable aumento del 322% en los ataques de divulgación de información. Este tipo de delito, pone en jaque tanto a individuos como a organizaciones ya que implica que el uso de esos datos pueda ser explotados de manera maliciosa, como el robo de identidad o el fraude financiero. En 2023, el coste medio de una filtración de datos alcanzó un nivel histórico de 4,45 millones de dólares. En Latinoamérica, el costo promedio aumentó un 32% en comparación con 2022, llegando a los USD 3,86 millones, según el Cost of a Data Breach Report 2023 de IBM.
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