La empresa planea designar un nuevo CEO durante la primera mitad de 2025 y, mientras tanto, un comité ejecutivo provisional estará encabezado por el presidente de Stellantis, John Elkann.
Carlos Tavares ha dejado su cargo como CEO de Stellantis antes de lo previsto, tras cuatro años liderando el grupo automovilístico. Aunque inicialmente estaba previsto que su contrato finalizara en enero de 2026, la renuncia se precipitó debido a diferencias con el consejo de administración. La caída en la rentabilidad y la cotización del grupo, matriz de marcas como Peugeot, Opel, Citroën, Fiat y Jeep, fueron factores determinantes en esta decisión.
John Elkann, presidente de Stellantis y heredero de la familia Agnelli, asumirá el liderazgo provisional de la compañía mientras se busca un nuevo CEO, un proceso que se espera concluir en el primer semestre de 2025.
El comunicado oficial de Stellantis, el cuarto mayor fabricante de automóviles del mundo, explica los motivos detrás de la salida de Carlos Tavares. Desde su creación en 2020, la compañía destacó por la sólida alineación entre accionistas, el consejo de administración y su CEO. Sin embargo, en las últimas semanas, diferencias estratégicas entre estas partes propiciaron la decisión anunciada ayer.
John Elkann expresó su gratitud hacia Tavares por su liderazgo en la creación del grupo y las transformaciones previas en PSA y Opel, que posicionaron a Stellantis como un referente global. Asimismo, Elkann aseguró que trabajará junto al comité ejecutivo provisional para garantizar la continuidad de la estrategia de la empresa y proteger sus intereses a largo plazo mientras se selecciona un nuevo CEO.
Recorrido destacado
La renuncia de Carlos Tavares pone un abrupto final a una carrera destacada, marcada por su éxito al revitalizar el grupo PSA tras asumir su dirección en 2014. Durante su gestión, logró la adquisición de Opel a General Motors en 2017 y lideró la creación de Stellantis en 2021, resultado de la fusión con Fiat Chrysler en una operación valorada en 50.000 millones de euros.
A pesar de esta trayectoria, Stellantis enfrenta un contexto financiero desafiante. El grupo confirmó sus previsiones para 2024, presentadas a finales de octubre, las cuales reflejan una significativa reducción en su margen operativo ajustado respecto al año anterior. En el primer semestre de 2024, las ganancias cayeron un 48%, situándose en 5.647 millones de euros, mientras que la capitalización de mercado se redujo un 40%, alcanzando los 36.700 millones de euros.
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