El pasado 12 de diciembre tuvo lugar la segunda edición del Foro de Sostenibilidad, organizado por CMS Europe y con el apoyo estratégico de Verifica – part of B2 Impact, con el objetivo de crear un espacio para promover un sector del crédito más sostenible.
En el marco de este encuentro, el equipo de Open Hub News tuvo la oportunidad de entrevistar a Carles Agustí, ODS Manager en la International Federation of Global and Green Information Communication and Technology (IFGICT). El experto presentó las conclusiones del segundo “Barómetro sobre la implementación de Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en el ámbito financiero en España”. En este informe, el ODS Manager analiza el estado de materialidad de los ODS.
Entre las conclusiones, expuestas junto a Maria Haddad, Chief Brand and Sustainability Officer en B2 Impact, durante el evento, se encuentra la siguiente información: más del 50% de las empresas expresan avances en sostenibilidad en este último año. Además, el barómetro también apunta que dónde más se ha avanzado es en la comunicación de la sostenibilidad, y que se ha visto que dónde más cuesta es en el terreno de la gobernanza.
Siendo este el contexto de la materialidad ODS en España, en esta entrevista exclusiva Carles Agustí comparte su perspectiva sobre la situación actual de la sostenibilidad en la industria financiera, así como las estrategias responsables que deben aplicar las empresas y su previsión de cuál será el mapa de aquí a 15 años, en esta materia.
¿Cuál es tu perspectiva sobre la situación actual del estado de los ODS/ESG en los diferentes actores de la industria financiera (bancos, fondos, servicers, Fintech, instituciones, etc.) y en general?
Creo que hay un avance rápido y esto se ha podido ver hoy en la presentación del segundo barómetro. La principal conclusión es precisamente que todos los datos indican este avance rápido. En un año y medio se ha visto un avance significativo en muchos terrenos de la implementación de los ODS y, por ende, de toda la sostenibilidad.
Esto tiene su riesgo también, como por ejemplo que parece que el dato que avanza más es comunicación. La comunicación es muy importante, pero es la fase final. Hay que saber qué comunicar, tener realmente una estrategia de sostenibilidad y tenerlo todo definido antes de comunicar. En cualquier caso, hay un avance que no es solo una opinión, sino que es empírico y se demuestra en este barómetro.
¿Cómo y qué estrategias responsables pueden aplicar las instituciones para abordar los desafíos ambientales, sociales y de gobernanza?
Tenemos la suerte de que los ODS son transversales. Es una estrategia mundial aprobada por las Naciones Unidas, válida hasta el año 2030, que no quiere decir que se acaben en el año 2030. Se reformularán y aparecerá otra versión de los ODS.
Son absolutamente transversales, flexibles y aplicables a cualquier sector, sea financiero o sea del tipo que sea. La flexibilidad llega hasta tal punto de que el propio individuo puede implementar los ODS de las 169 metas de los ODS, hay entre 30 y 35 que el propio individuo puede implementar y mejorar. Esto nos lleva a una flexibilidad límite de las Naciones Unidas al individuo, y totalmente transversal a todos los sectores. Por lo tanto, es sostenibilidad en sentido general, que quiere decir responsabilidad social corporativa, quiere decir gobernanza, quiere decir aspectos económicos y aspectos ambientales, y afectan a todas las empresas por igual.
¿Qué papel tiene la sostenibilidad en la toma de decisiones, la gestión de riesgos, la creación de valor a largo plazo, entre otros aspectos, para todas las partes interesadas?
Pues aquí entramos en el aspecto de gobernanza, la G de la tendencia ESG que es parte fundamental en la sostenibilidad. Porque cómo implementa en empresas grandes y no tan grandes una estrategia que es de suma importancia, que afecta a todos y transversal.
Eso requiere una adaptación de la gobernanza de la empresa, o sea, la toma de decisiones, y una reasignación de funciones, en cierta manera. Es muy recomendable la figura del CSO (Chief Sustainable Officer). Es una nueva figura que aparece, que es importante, que es la persona que ha de ser responsable de implementar toda esa estrategia dentro del Consejo de Administración de la empresa. Por lo tanto, esa es una afectación a la toma de decisiones de la empresa decisiva. O creemos en la sostenibilidad, vamos a ella y adaptamos nuestros modelos de gobernanza. O si no, no lo conseguiremos.
Se prevé que para los próximos 10-15 años veremos más cambios en materia de sostenibilidad que en los últimos 50 años. Esto supondrá una revolución en la manera de trabajar y en los perfiles profesionales. ¿Cuál crees que será la situación real?
Creo que la tendencia que explicas es correcta y viene derivada de la urgencia de la sostenibilidad. No hace muchos años, diez, 15… más diez que 15, que empieza a estar en nuestras vidas y menos todavía que empieza a entrar en las vidas de las empresas.
Tengamos en cuenta que el mundo está reaccionando a una necesidad urgente, que es el calentamiento global del planeta provocado por el efecto invernadero, y eso requiere una respuesta rápida. Cualquier diagnóstico de cualquier tipo privado o público de las Naciones Unidas te indica esa necesaria rapidez. Hablamos 2030 y 2050 que en términos históricos es muy corto plazo, también que hay que reaccionar.
Por lo tanto, efectivamente, y se ve en el barómetro y se ve en el sector financiero, estamos en un cambio acelerado que efectivamente afectará no solo a la gobernanza de las empresas, sino a los perfiles. Perfiles adaptados, formados, que entiendan y crean en la sostenibilidad, que es transversal y, por lo tanto, afecta a todo en cualquier posición. Irán ganando protagonismo en las empresas.
Es una revolución que nos viene por urgencia, por la que hemos de apostar porque así nos lo pide la sociedad y, sobre todo, las nuevas generaciones y, por lo tanto, el comportamiento del mercado. Y vamos allí sí o sí, con los cambios que se irán viendo. Y es bueno que cada año en eventos como este podamos analizarlos y ponernos al día.
¿Es decir, no crees que es una visión optimista, sino que se va a cumplir tal cual se predice?
Yo creo que sí. Lo que no podemos medir es la velocidad. Por ejemplo, ahora estamos en la COP 28, que parece que sacará un acuerdo sobre combustibles fósiles light, digamos, porque se ha de acordar con China, Rusia, diversos países con sus intereses.
Pero vamos ahí. Claramente es una necesidad, es una prioridad de todos los gobiernos, es una prioridad en la Unión Europea, el mundo empresarial se está adaptando. Lo que yo no sé decir, y ahí viene el más o menos optimismo, es la velocidad. ¿Correremos tanto como para que el año 2030 o 2050 hayamos frenado el calentamiento global? Ahí no hay respuesta. Pero yo soy optimista en ese sentido. En las empresas, en la sociedad… está la sensibilidad y, por lo tanto, vamos a ello todos con mayor o menor velocidad. Aquí está el reto.
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