
En un momento en que la digitalización avanza a gran velocidad, también lo hace su impacto ambiental. Por ello, hablamos con Jaume R. Palau, fundador de cdmon, para conocer cómo una empresa tecnológica puede reducir su huella de carbono sin renunciar a la innovación ni al crecimiento. En esta entrevista, Palau comparte la visión y las decisiones estratégicas que han convertido a cdmon en un referente de sostenibilidad dentro del sector del hosting, con un enfoque claro en eficiencia energética, uso de energías renovables y responsabilidad en todo el ciclo de vida del hardware.
La conversación aborda desde el diseño sostenible de sus centros de datos hasta la apuesta por arquitecturas digitales más ligeras y eficientes, pasando por la importancia de medir para mejorar. Palau defiende que descarbonizar Internet no es una utopía, sino una cuestión de voluntad y coherencia empresarial. Una entrevista que invita a repensar el modelo de crecimiento del sector digital y pone sobre la mesa soluciones concretas para reducir su impacto medioambiental.
¿Qué papel juega la eficiencia energética de los centros de datos en la estrategia de sostenibilidad de cdmon, y cómo medís su impacto ambiental?
Lo que no se puede medir, no se puede mejorar. En cdmon, la eficiencia energética no es un complemento, es parte de la estructura misma del proyecto. Por eso diseñamos nuestro centro de datos desde cero con criterios sostenibles, integrando un sistema de refrigeración líquida que nos ha permitido alcanzar un PUE medio de 1,10. Eso significa que prácticamente toda la energía que usamos va destinada a alimentar los servidores, y no a disipar el calor que generan. Además, operamos al 100 % con energía verde certificada. No compramos bonos para compensar emisiones: usamos energía renovable real desde el origen. Medimos constantemente el rendimiento energético y seguimos estándares internacionales para auditar nuestro consumo y mejorar allí donde aún podemos hacerlo.
¿De qué manera integra cdmon principios de sostenibilidad en el desarrollo y despliegue de nuevas infraestructuras o servicios digitales?
En cdmon no entendemos la sostenibilidad como una acción puntual, sino como una forma de construir. Desde el primer plano de un nuevo servicio hasta la implementación final, nos preguntamos: ¿esto consume más de lo que debería?, ¿podemos hacerlo más eficiente?, ¿cuál será su impacto a largo plazo? Aplicamos esta lógica tanto a nivel técnico , optimizando el uso de CPU, RAM o espacio en disco, como a nivel estratégico, apostando por arquitecturas escalables, por software más ligero y por el uso compartido de recursos sin comprometer la privacidad ni el rendimiento. Para nosotros, ser sostenibles es ser responsables con los recursos de quienes confían en nosotros.
¿Qué tecnologías o prácticas consideras clave para reducir la huella de carbono del sector del hosting en los próximos años?
No hay soluciones mágicas, pero sí hay decisiones contundentes. La primera: construir menos y optimizar más. No tiene sentido levantar grandes infraestructuras que luego funcionan a medio gas. Hay que maximizar la eficiencia de lo que ya tenemos. Lo segundo: usar energías 100 % renovables desde la base. No vale con compensar después. Y lo tercero: dejar de aceptar software sobredimensionado, con capas y capas que solo consumen recursos innecesarios. Necesitamos volver al diseño simple, que haga lo que tiene que hacer con el mínimo coste energético posible. Y más allá de la tecnología, hace falta voluntad ética en el sector, porque descarbonizar Internet es posible, pero exige compromisos reales.
¿Cómo gestionáis el ciclo de vida del hardware en cdmon para asegurar un uso responsable de los recursos y minimizar residuos electrónicos?
Lo primero es elegir bien. Comprar hardware eficiente, duradero y escalable nos permite no entrar en la rueda de la renovación constante. Después, priorizamos el mantenimiento preventivo y la actualización de componentes frente a la sustitución completa. Cuando un equipo ya no cumple su función, pasa por un proceso de reciclaje con gestores autorizados o se reutiliza internamente para tareas menos exigentes. También hemos apostado por proveedores que nos ofrecen transparencia y trazabilidad sobre el ciclo de vida de los equipos. Nuestro objetivo es tener lo último, lo que funciona bien, durante más tiempo y con el menor impacto.
Desde tu experiencia, ¿qué desafíos encuentras al alinear crecimiento empresarial con sostenibilidad digital, y cómo los abordáis en cdmon?
El reto es no caer en el atajo. En un mercado tan competitivo, muchas veces se prioriza el crecimiento rápido, sin considerar el coste ambiental. En cdmon hemos decidido crecer desde otro lugar: el de la eficiencia, la ética y la responsabilidad. Esto implica renunciar a ciertas prácticas, sí, pero también nos permite construir una empresa sólida y coherente con el mundo que queremos. Invertimos más en infraestructuras sostenibles, aunque eso signifique amortizarlas más lento. Rechazamos proveedores sin garantías ecológicas. Y lo más importante: tratamos de inspirar a otros en el sector para que también lo hagan. Porque la sostenibilidad digital no es una opción de futuro. Es un compromiso de presente.
Sigue toda la información de Open Hub News en Linkedin o en nuestra newsletter.